jueves, 2 de febrero de 2017

DIFERENCIAS ENTRE EMBARAZOS

Es cierto eso que dicen que no todos los embarazos son iguales porque yo estoy viviendo mi segundo embarazo de forma totalmente distinta al primero.
No sé si porque el primero venía de nalgas, pero para mí esa ya es una gran diferencia.

Con mi primer embarazo he tenido náuseas y vómitos más tarde y más tiempo que con el segundo, pero con el segundo me volvieron a repetir en el tercer trimestre, cosa que en primer embarazo no me pasó.

Ahora tengo ardores por la noche, un reflujo que despierta y me pon de los nervios porque no hay manera de aliviarlos, en mi primer embarazo no tuve nada de nada.

Cuando mi primer niño estaba de nalgas la mayor molestia que tenía era en las costillas, como si me quemara la piel y dolor - quemazón en esa zona, ya que tenía su cabeza estaba colocada en esa zona, ahora siento presión en la zona pélvica. Me cuesta trabajo caminar porque cada dos por tres me dan pinchazos y hacen que me pare en seco.  Al estar colocado de cabeza, me oprime más la vejiga y me dan más ganas de hacer pis, unas veces es verdad y otras veces lo parece, eso me agobia un montón.

Y con respecto a venir de nalgas o no, el mayor cambio que siento es que siento mucho los movimientos del bebé. Al venir de nalgas lo que sentía era el movimiento de su cabeza en mis costillas y poco más, sin embargo, con el segundo siento más sus movimientos y su padre y su hermano también los sienten. Puedo ver como se mueve la barriga y es una sensación muy guapa y muy rara.

Tengo muchísimo calor, no recuerdo que en mi primer embarazo sudara por todo, y eso, que me pilló el verano. Ahora parece que llevo una estufa conmigo. Es agobiante. Llevo abrigo, porque no puedes salir a la calle sin él, pero al poco me agobia. Entro en los sitios y, donde ya voy con mi estufa personal, ponen la calefacción a tope y tengo que andar con el abanico en el bolso para no ahogarme.

Estoy mucho más cansada ahora. Igual se debe a que tengo otro pequeño que necesita atención, tiene sus horarios de cole, sus rutinas y sus necesidades, cosa que con mi primer embarazo no pasaba. Tenía todo el tiempo del mundo para mí. Si necesitaba descansar lo hacía, si quería salir, salía, pero si quería quedarme en casa pues me quedaba, ahora no es así y esto agota y mucho.

Lo bueno de mi segundo embarazo es que llevo menos kilos encima. De momento, en mi semana 39 he engordado unos 13 - 14 kilos, y con mi primer embarazo llegué a los 20 kilos. Algo bueno tenía que tener el segundo, o no.

Por otro lado, sospecho que el embarazo a término va por el mismo camino que el anterior. De momento no hay señales de que se adelante, y eso que llevo con contracciones desde la semana 24, pero son irregulares y poco dolorosas, y mis sospechas son que llegaré a la semana 41 como me pasó con el primero.

En resumen, no todos los embarazos, síntomas y partos son iguales, ya os contaré si cuando de a luz coincide con el primero o se adelanta o se retrasa más.

Espero que todo salga bien y como suelen decir todas las que son mamás : " que sea una hora corta".

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